¿Cómo preparar la entrevista de trabajo cuando el entrevistador es el gerente?

Suena el teléfono a los pocos días de haber pasado la primera entrevista de trabajo, o incluso dos, según el sistema que utiliza cada empresa. La voz al otro lado te felicita por haber salido airoso de aquella prueba, tú ya casi estás dando saltos de alegría y… resulta que te convoca para una última entrevista, esta con el “Súper jefe”. Una única idea ocupa toda tu mente, ¿cómo prepararse la entrevista de trabajo cuando el entrevistador es el gerente?

Antes de avanzar, el primer paso es despedirte del interlocutor de esa llamada agradeciendo su nueva propuesta. Que tu voz no suene a decepción porque esperabas ya una respuesta definitiva. Tampoco debes parecer desorientado, como si esta esta nueva entrevista de trabajo te hubiese descolocado o puesto nervioso. ¡Has llegado hasta aquí superando a competidores muy preparados, debes sentirte orgulloso!

A la vez, no estaría mal enterarte de todo lo que puedas respecto a tu nuevo entrevistador, el enfoque de la cita, dónde tendrá lugar, si hay muchos candidatos… el mínimo detalle puede marcar la diferencia. Una vez hecho esto, entremos en la verdadera materia.

Prepararse la entrevista de trabajo cuando el entrevistador es el dueño de la empresa

Sin nervios, ni presiones, pero tampoco te relajes. A esta última parada del proceso habréis llegado un par o tres de futuribles. El objetivo está muy cerca pero aún no está conseguido. Tu mentalidad sebe ser positiva, hasta ahora lo estás haciendo muy bien, eso debe darte seguridad.


El siguiente paso es preguntarte, ¿por qué esta entrevista de trabajo con el gerente? Bueno, lo normal es que la criba importante haya estado en manos del departamento de Recursos Humanos y sea necesaria la aprobación final del candidato por parte de la Dirección. Es habitual que esta última entrevista sea bastante más corta que otros tipos de entrevista de trabajo, pero es la definitiva, no lo olvides. Ten en cuenta algunas recomendaciones muy útiles:

  • Sobre todo, se va a evaluar en este momento tu encaje en la empresa, más que tus competencias profesionales que ya se han comprobado. Por tanto, el feeling es esencial. Tu comportamiento debe ser correcto, no te confíes mostrando excesiva familiaridad o confianza. Y, desde luego, abandona el mínimo rasgo de arrogancia.
  • Estudia a fondo la filosofía y todo lo que puedas acerca de la empresa. Vas a tener que hacer tuyos sus valores, es la oportunidad de hacérselo saber.
  • Los altos directivos pueden adoptar una posición de distanciamiento, plantear las preguntas con mayor frialdad o incluso dureza. Es una estrategia para comprobar si eres capaz de manejar situaciones difíciles, ¡tu ocasión para hacer gala de esa seguridad y concentración!
  • Las preguntas trampa son bastante frecuentes en esta última entrevista. Estás son las preferidas que nos han confesado los gerentes con los que hemos hablado: ¿Por qué cree que ha llegado hasta aquí?, ¿cuál es el sueño de su vida?, ¿qué quería ser cuando le preguntaban de niño?, ¿qué le interesa más generar respeto o miedo? Sí, ya ves, te pueden preguntar cualquier cosa. Para sortear este tipo de cuestiones con éxito ten presente en tu respuesta lo que podría venirle bien a la empresa, no tus intereses. Es importante preparar la entrevista de trabajo y saber responder a estas posibles preguntas.
  • Cuida tu comportamiento desde que entres por la puerta. No será el primer gerente que, tras la visita de un candidato, pregunta que impresión ha causado al guarda de seguridad, a la persona que está en recepción, a su secretaria, a quien te atendió por teléfono… Todos forman parte de esa empresa y es importante que dejes una buena huella en tus futuros compañeros.

Después de contestar a esa duda de ¿cómo prepararse la entrevista de trabajo cuando el entrevistador es el gerente?, ese consejo final con el que nos gusta acabar. Sé autentico, resolutivo y sencillo, cualidades que jugarán a tu favor.